Steve Lieberman, The Gansta Rabbi - Cheap Japanese Bass Opus 236 48/36

Un álbum totalmente diferente a lo que has escuchado hasta el día de hoy

Arrancamos la semana con energía y con una sorpresa que, honestamente, no podíamos dejar pasar. Porque hay discos que se sienten como lo mismo de siempre, que parecen repetir lo que ya hemos escuchado mil veces, y luego están esos proyectos que rompen paradigmas, que nos vuelven locos y nos recuerdan por qué amamos la música. Hoy queremos hablarte de uno de esos álbumes el cual es titulado “Cheap Japanese Bass Opus 236 48/36”, una propuesta que vas a vivir al limite. Este proyecto es un viaje sonoro en el que conviven instrumentos, matices y texturas que pocas veces escucharás en un mismo lugar. La especialidad aquí no es sonar armonioso o bonito de manera convencional, sino crear una experiencia que atrape por su rigor y autenticidad. Cada pista está pensada para sorprender, con sonidos que parecen chocar entre sí pero que terminan construyendo un universo propio, como si fuese un engranaje de algo más grande.

El responsable detrás de esta locura musical es nada más y nada menos que “Steve Lieberman, The Gansta Rabbi”, un artista con más de cinco décadas de trayectoria. Así es 50 años dedicados a explorar la música desde ángulos poco cotidianos, con una mente que nunca dejó de experimentar. A lo largo de su carrera ha probado con distintos instrumentos, géneros y estilos, pero lo que realmente lo define es esa necesidad de romper barreras y dejar una huella que nadie más pueda imitar.

Y es justo esa esencia única lo que encontramos en este proyecto. No es música “bonita” para sonar de fondo, es música que se mete de lleno en tu cabeza y en tu cuerpo. Desde la furia hasta la oscuridad de ciertos sonidos, pasando por momentos de euforia y caos controlado, aquí no hay espacio para lo predecible. Es un álbum lleno de matices, donde la emoción puede cambiar de un segundo a otro, y ahí es lo que lo hace especial.

La dinámica del disco se siente como ir a un parque de diversiones y subirte a la montaña rusa. Donde las 11 canciones son esos sube y baja que te entrelazan por un viaje inimaginable de adrenalina el cual funciona como capítulos de una historia, con una temática que no es evidente, como si fuera esa telenovela que ve tu mamá pero con un final diferente. Lo que más sorprende es cómo a pesar de todo lo que hemos mencionado antes, todo se siente coherente. No es ruido por ruido, ni extravagancia en su máxima expresión, hay intención detrás de cada nota. Y aunque a primera escucha puede sonar arriesgado, después de un par de repeticiones te das cuenta de que esa rareza es justo lo que lo hace adictivo.

Por lo que el día de hoy ha sido un honor para nosotros en Patata Music Medio el traerte este proyecto lleno de energía pura que te hará vibrar. Recuerda que en los iconos de abajo te dejamos enlaces a los diferentes perfiles del artista por si quieres explorar un poco más sobre este excepcional trabajo, estamos seguros de que no te arrepentirás de echarle un ojo y regalarle un follow. Para finalizar esta nota queremos invitarlos a que nos comenten qué les pareció este proyecto. Eso sería todo, hasta la próxima, patatines.